Original de Netflix

Por El Conde de Montecristo

Luego de 15 días de obligatoria reclusión en su hogar, Juan Chinguetas se preparaba para los oficios virtuales de la Semana Santa. Su reciente conversión había sido decisiva y por lo mismo prestaba particular atención a la programación digital de las misas, ahora que el Coronavirus había trastocado la vida de Yucatán.

Estaba sudando profusamente con el tapabocas que confeccionó su mujer -hecha con tela de cortina de la Parisina- y luego de colocar en su puerta una cruz elaborada con hojas de lengua de vaca de su propia mansión en Cholul, se acostó un momento en una de las hamacas que compró a los reclusos del Cereso.

El calor era de 40 grados y la hamaca con hilos de algodón que tanto le había recomendado su amigo Pancho Brito resultó ser una magnífica adquisición para después del baño de piscina.

En efecto, Juan Chinguetas, el antiguo y codicioso personaje alguna vez apodado “El Rey de los lotes de inversión” ya hasta colaboraba con la Pastoral Penitenciaria y parte de su apostolado consistía en ayudar a los reclusos a vender sus mercancías. Era una vida de ensueño.

Abrió el periódico y empezó a leer las noticias: la primera plana del Diario de Yucatán decía que el gobernador Mauricio Sahuí Rivero manifestó que la aprobación de un crédito por 1728 millones para atender la contingencia por el Coronavirus fue un acto de congruencia de los legisladores de su partido y lamentó las declaraciones de la oposición pidiendo no politizar la ayuda urgente a los yucatecos.

-Es lamentable que se juegue con el futuro de Yucatán. Cuando era candidato sostuve que que la sociedad yucateca demandaba un gobierno que conozca las necesidades de Yucatán como yo las conozco, con planeación realista que haga diagnósticos adecuados y plantee soluciones viables, pero que también sume a la sociedad en la construcción de éstas, expresó.

En otra nota el presidente municipal de Mérida, Víctor Caballero Durán manifestó que cerrará filas con el gobernador Sahuí Rivero para ofrecer a los meridanos de las comisarías créditos del programa “CrecicuentaMID” a fin de proteger la economía de los más vulnerables luego de la contingencia.

La dirigencia estatal del PAN y del PRD calificaron de innecesaria la autorización del Congreso al gobierno estatal por un préstamo por 1728 millones , pues apenas hace unos días, el Presidente de la República, Ricardo Anaya Cortés aprobó de manera inmediata un plan de incentivos fiscales para las empresas de todo el País, y de manera emergente un aumento del 40% al Ingreso Básico Universal a partir del mes de abril y hasta el mes de octubre.

A su vez, la profesora Blanca Estrada Mora, de la organización ¡Ya Basta! dijo que es lamentable el papel de los diputados “petronilos” y que nadie pregunte cuál es el sustento de la iniciativa y con qué criterios se definieron los montos que argumenta el Poder Ejecutivo.

Dijo que solicitará por Transparencia el padrón de beneficiarios del Ingreso Básico Universal, que a su juicio, es utilizado como un programa clientelar operado por los superdelegados en el interior del Estado y que se reparte en ranchos particulares sin respetar las medidas de sanidad en plena contingencia.

Por otro lado, el líder de Morena en Yucatán, Mario Mex Albornoz criticó que el senador panista Joaquín Díaz Mena esté regalando tapabocas y gel antibacterial con su nombre impreso en varias reuniones partidistas y adelantó que su partido prepara una denuncia ante la Vicefiscalía Especializada en Delitos Electorales.

Cansado de leer tantas notas políticas, Juan Chinguetas extrañó aquellos días previos a la contingencia sanitaria: ya no habían bodas, bautizos, reseñas de cine, exposiciones de arte, tampoco eventos culturales y menos deportivos.

Se canceló la Expo Campo, el Tianguis Turístico, la Expo Construcción y todas las graduaciones escolares quedaron suspendidas hasta nuevo aviso. En suma no había ni temas para hablar que no fueran cosas de la maldita pandemia.

Resignado y casi desesperado, respiró y pidió a su mujer el control de la televisión.

-El control, necesito el control, dame el control mujer!

Su mujer lo sacudió con firmeza.

-¿Qué te pasa Juan? ¡Pero si ya lo tienes en la mano!

¡Ja, ja, ja! Otra vez te quedaste dormido viendo “Esta mierda me supera”!